Una mala mano una noche de juego, una pérdida millonaria, una venganza en contra de aquel que le dejó en la calle a él y a su familia con apenas 20 años, una mujer que será el instrumento para esa venganza y una amistad de la infancia que va a pasar por muchos altibajos debido a esa obsesión. Todo esto y más ocurre en el primer libro de una de las series de Sarah Maclean.
En general la trama, aunque muy trillada, me ha gustado bastante y no me ha parecido que el ritmo decayera demasiado en ningún momento. Mi problema han sido los protagonistas y la forma que ha tenido la autora de desarrollar su historia amoroso.
Por un lado tenemos a Michael Bourne, un hombre que perdió todo su patrimonio en un juego de cartas, y por otro lado tenemos a Penélope; la hija de un aristócrata que lleva enamorada de Michael toda su vida y que siempre fue su mejor amiga.
Ambos pierden contacto cuando él se marcha con el rabo entre las piernas y sediento de venganza contra el hombre por el que perdió todo, y vuelven a reencontrarse 9 años después, cuando él se aparece de nuevo a reclamar lo que un día perdió.
Hasta ahí bien. No voy a negar que las tramas que tienen amores desde la infancia siempre me enganchan más porque veo más creíble el insta love de las parejas.
Pero lo que no me ha acabado de cuadrar, es ¿Por qué él quiere venganza? Tal y como yo lo veo, los motivos del personaje no son muy sólidos.
Sí, es cierto que perdió toda su fortuna y todas las propiedades que no estaban atadas a su título cuando era joven contra otro aristócrata, pero, ¿Alguien le puso una pistola en la cabeza para que lo hiciera? No. Puedo entender su rabia y frustración, pero lo que no entiendo es que quiera vengarse del hombre que le quitó todo, cuando él está haciendo exactamente lo mismo con otros aristócratas al mismo tiempo. Ya que el club de juego que regenta se dedica a eso. A dejar sin blanca y sin propiedades a hombres de su condición. No sé si es que yo lo estoy viendo desde una perspectiva egoísta o qué, pero me parece una doble moral del personaje un poco extraña.
Y luego tenemos a Penélope, la principal víctima en todo esto. Ella hereda en su dote las tierras que en otro tiempo fueron de Michael y es ahí cuando él entra en acción, la acorrala y la obliga a casarse con él haciéndola mención en cada oportunidad que puede que ella es solo un instrumento para conseguir lo que quiere y que a cambio la dará aventuras.....menudas aventuras. Dejarla sola en una casa enorme y no hacerla ni caso es una aventura muy excitante...si señor. Y no podemos olvidar todas las veces que la engaña, la engatusa y luego la dice que es un instrumento. Así como tampoco podemos olvidar las veces que ambos personajes, sobre todo ella, se echan en cara no ser los mismos que hace 10 años.
Menos mal que al final ella saca las uñas y le demuestra que de tonta no tiene un pelo. Aunque el daño ya está hecho y su amorío no me ha convencido mucho, lo siento.
Y no nos podemos olvidar de Tommy, el tercero en este trío de amigos que tiene que sufrir los ataques gratuitos de venganza de Michael cuando él ni siquiera tuvo la culpa de nada de lo que le hicieron (aunque fuera su padre quien le despojó de todo a Michael)
Pero no todo ha sido "malo", los últimos capítulos han sido de lo mejorcito del libro. No solo porque Penélope saca las garras y empieza a hacer mendigar a Michael por su atención (aunque poco le dura la indiferencia, pero bueno), sino porque la venganza en sí por fin va tomando forma, nos vamos enterando de algún secretillo por ahí guardado y hay mucha más acción. Aun así, el final ha sido de lo más inverosímil. (No comento mucho por si lo leéis, para que sea sorpresa, como me ha pasado a mí)
Solo por esos últimos capítulos, es que el libro para mí se salva bastante.
No sé si es porque me ha pillado en una semana un poco ocupada, porque lo he leído en inglés y a lo mejor alguna escena no la he pillado del todo bien, porque tenía muchas expectativas en este libro después de leer la serie de los números, o porque me voy haciendo cada vez más quisquillosa con según qué historias, pero no me ha llegado a convencer del todo.
Solo espero que el segundo sí lo haga, porque tiene un argumento muy bueno y Cross es uno de mis personajes secundarios favoritos dentro de este libro.
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